IGUALDAD ENTRE MUJERES Y HOMBRES EN EL AMBITO PENITENCIARIO
PROGRAMA DE ACCIONES
PARA LA IGUALDAD EN EL AMBITO PENITENCIARIO
1. PROGRAMA DE IGUALDAD ELEGIDO
Como funcionario de prisiones he elegido el PROGRAMA DE ACCIONES PARA LA IGUALDAD ENTRE MUJERES Y HOMBRES EN EL AMBITO PENITENCIARIO, basado en un exhaustivo diagnóstico de las diferencia de trato y de las situaciones de desventaja que hoy perduran en el sistema de ejecución penitenciaria en el ámbito de la igualdad entre las mujeres y los hombres en el ámbito penitenciario.
Este programa prevé la implementación de 122 acciones positivas en respuesta a objetivos generales;
·
Erradicar la discriminación
de pudieran detectarse por razón de género.
·
Conocer las características específicas
de estas mujeres para poder atender adecuadamente a sus necesidades.
· Disminuir la vulnerabilidad de la mujer reclusa frente a situaciones de violencia o dependencia.
Cuenta para su desarrollo con la estrecha colaboración del
Ministerio de Igualdad a través del Instituto de la Mujer.
2. AMBITO DE ACTUACION DEL PROGRAMA
Salvo acciones y programas concretos y limitados, no se han implementados programas específicos dirigidas a ellas, sus necesidades y demandas, haciéndolas participes, en el mejor de los casos de los diseñados para una demanda penitenciario o extrapenitenciaria no caracterizada, no se ha impulsado hasta ahora una estrategia general penitenciaria de género, Nos encontramos ante un colectivo que representa 7,6 % de la población reclusa,
La mujer vive el encarcelamiento de forma diferente y por
ello hay que promover para ellas medidas y soluciones diferentes, Sus
características personales y otras razones sociales que fundamenta su exclusión
social, son las que las que hacen a las mujeres que cumplen condena plenamente
vulnerables a la vez que en el ámbito familiar, recaen frecuentemente en ella
la responsabilidad de los hijos no emancipados o personas dependientes, el
mantenimiento de la unidad familiar o el sostenimiento económico, factores que
tienen fuerte incidencia en la comisión del delito y se agrava particularmente
con el encarcelamiento, tiñendo su estancia de una incertidumbre, angustia y
culpabilidad extra.
3. IMPACTOS Y RESULTADOS DE ESTA POLITICA PUBLICA PENITENCIARIA
Se
proponen distintas cuestiones para abordar las distintas formas de discriminación
por razón del género en el ámbito penitenciario-
·
Mediante la aplicación de
medidas capaces de acortar la duración de encarcelamiento efectivo y su
temprana reincorporación a sus responsabilidades familiares y laborales,
utilizando los mecanismo que cuenta nuestro ordenamiento jurídico como los
diferentes regímenes abiertos dentro de los cuales el control de cumplimento de
la ejecución mediante dispositivos electrónicos están adquiriendo un fuerte
protagonismo. Impulsar atendiendo a la baja peligrosidad cambios legales con
medidas de atenuación, suspensión, sustitución de penas de prisión para mujeres
embarazadas y las que tengan hijos a su cargo no emancipados.
·
En el área social, diseñar un
protocolo de acogida inmediata para la atención de problemáticas acuciantes que
se derivan de su ingreso en prisión, fortalecimiento del entorno familiar y
búsqueda de recursos sociales alternativos.
·
En la intervención educativa,
cubrir todas las áreas desde el entrenamiento ya adquisición de habilidades
básicas personales, niveles escolares, formación profesional, instrucción
laboral, sin olvidar la promoción cultural y deportiva
·
Intervención personal,
promoción a la salud, drogodependencia, prevención de la violencia, explotación
económica, sexual, con la exposición de
modelos conductuales que promueven la independencia en la vida afectiva, sexual
y económica
· Y la maternidad en prisión con la creación de Unidad de madres con hijos ubicadas fuera de los establecimientos penitenciarios ordinarios, se trata de obtener la máxima normalización en la vida de los menores allí ingresados.
4. FORTALEZAS Y DEBILIDADES QUE PRESENTA ESTA POLITICA PUBLICA
Como puntos fuertes con que cuenta la organización penitenciaria para acometer estos
objetivos esta, en primer lugar, la decidida apuesta por eliminar cualquier actitud
o circunstancia que permita un trato declinatorio hacia las mujeres en el
sistema penitenciario, En segundo lugar, en relación a las mujeres sujetas a
medidas de sujeción penal, la evidencia de una alta participación en cualquier
actividad formativa, laboral o lúdica que se le propone. Pese a la ausencia de
planificación global de las acciones, fundamentalmente específicas, las
reclusas muestran un marcado interés por su integración y desarrollo personal
por encima de su proporción en la población total de personas internadas. Este
dato es esencial en la asunción de responsabilidades de la administración
Penitenciaria para abordar un plan de acción con garantías de éxito.
Como
puntos débiles, la escasa sensibilización general de la organización,
constatamos la necesidad de un plan de formación del personal penitenciario en
las diferencias de género y establecer un sistema de recogida y tratamiento homogéneo
de datos, de obligado cumplimiento, que incluya la variable de género
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